Planta a planta (parte 1)

Su erección bajo el pantalón subía a medida que las plantas lo hacían bajo nosotros en aquel ascensor…..

Vuelta al trabajo… Otra vez tocaba chuparme los casi 15 minutos que tardaba el ascensor en subir desde la planta de parking hasta mi puesto de trabajo… Menos mal que no tenía que subir escaleras, pero la cuestión era quejarse de vicio, pero aquel día algo era distinto, nada más entrar al ascensor y pulsar el número 69 algo en mi cuerpo se percato de algo distinto… Su aroma impregno por completo mis fosas nasales así como lo había hecho todo su olor por el ascensor.

Sentía curiosidad de ver de quien provenía aquella aroma embriagadora, pero había algo en mis pies,  como si fuese cemento que no me dejaba moverme… Pero segundos después con una seductora voz ese hombre susurro ‘’Buenos días señorita’’. Pronto me apresure a darme la vuelta para ver de donde procedía esa voz, y en el fondo del ascensor estaba él, un apuesto chico de cabello oscuro y ojos totalmente negros, su mirada era cautivadora. Tenía una boca hecha para el deseo, labios carnosos, dientes perfectos, y sobre todo una tierna sonrisa mezclada con un ápice de travesura…

‘’Buu bu buenos días’’ Pude articular por fin después de el detenido escaneo visual al joven moreno… El volvió a soltar esa sonrisa y se apresuro a presionar el botón de la planta 74, lo que hizo que su cercanía fuese casi completa. No sabía porque, aquel hombre provocaba en mi algo que no acertaba a ubicar, su perfume, su pose, su forma de seducir… Si, seducía, no había intercambiado ni 2 palabras con él y ya tenía una atracción por el que ni en mis sueños más húmedos….

Pronto el ascensor comenzó a moverse, siempre me ponían nerviosa los ascensores, no me gustaban, pero no me quedaba de otra para subir a la zona alta del edificio. Comencé a mover el pie sobre mi tacón como acto de nerviosismo, quería que aquello terminase ya, y solo íbamos por la planta 5… ¿Por qué tenía que durar tanto? Acto seguido el joven apuesto estaba  a mi lado, puso su mano en mi hombro y me miro con sosiego intentando calmarme, pero en vez de eso mi nerviosismo aumentaba, me mordía el labio, me atusaba el pelo, miraba una y otra vez las plantas que quedaba…..

Pero de repente algo  se activo en mí, la mano del moreno estaba justo en mi barbilla, intentando que girase mi cara hacia el…. ‘’Tranquila, hoy este paseo va a ser algo distinto’’ Se apresuro a decir con seguridad… ¿Cómo que distinto? ¿A qué se refería? ¿Qué tiene de distinto hoy? Bueno… creo que era evidente lo que tenia de distinto… él…. Él era lo distinto….

Mi respiración se había hecho más pesada y el contacto de su piel con la mía era lo que la había activado… En mi cabeza solo resonaba probar esa apetecible boca, esa boca tan embriagadora…. Y sin dudarlo no lo pensé, no sé si era causa del nerviosismo ascensoril, o si aquel chico hacia que mi nerviosismo sexual actuase así….

Mis labios tomaron contacto con los suyos, eran tan carnosos como los imaginaba, al tacto con los míos era suaves, y  poco después cuando mi lengua invadía su boca me di cuenta de que no solo sabía seducir, sino que también sabía sucumbir a los mejores placeres… Su boca respondido a la mía sorprendentemente, su lengua invadía por completo mi boca, y salía, mordía mi labio inferior y pasaba la lengua despacito por el, y de nuevo mi boca atacaba la suya. Solté mi bolso instintivamente y mis manos fueron directas a su nuca, quedábamos a la misma altura, en estos momentos agradecía enormemente llevar tacones, a pesar de estar todo el día quejándome de ellos….

 Con mis manos en su nuca, rozaba con mis dedos ese cabello azabache mientras pronunciaba aun más el beso… Ya me estaban entrando las calores, notaba como aquel hombre provocaba en mi algo inusual… ¿Qué hacía yo en un ascensor, con un completo desconocido y comiéndole la boca? Simple…. Aquel hombre respiraba feromonas por los cuatro costados y eso para mí no pasaba desapercibido….

En pocos segundos no sabía cómo, pero estaba contra una de las paredes del ascensor, notaba todo su cuerpo sobre el mío y como su erección bajo el pantalón subía a medida que las plantas lo hacían bajo nosotros en aquel ascensor….. Su cuerpo rudo y musculado sostenía el mío, mis piernas estaban abiertas y  su cuerpo entre estas, esas manos fuertes sujetaban las mías por encima de mi cabeza y aquel hombre dejo de besarme para deslizarse por mi cuerpo…

Notaba sus labios por mi barbilla, descendiendo por mi cuello, y en ese punto justo se recreo, me volvía loca sentir sus labios sobre mi cuello, poco después su lengua y a continuación como su respiración cálida salía de entre sus labios… Mi cuerpo se estremeció ante sus actos, y de no ser porque sus manos sujetaban las mías y sus piernas me aprisionaban estaría en el suelo suplicando placer….

Pero no, poco después soltó mis manos y se apresuro a recorrer mi cuerpo cubierto por un fino vestido de seda hasta meterse bajo el, llegando hasta mi trasero y apretándome contra él, quería que lo notase, que supiese como su cuerpo también reaccionaba, tanto o igual que el mío…  Su erección se moría de ganas por salir de aquel pantalón y conforme sus manos estaban en mi trasero, las mías bajaban desde sus hombros, pasando por sus brazos, algo estrechos en aquella camisa negra, paseándose por sus pectorales y abdomen, hasta llegar a la cintura de su pantalón…. Mi mirada se encontró con la suya, y los dos nos desafiábamos con ellas…. Segundos después mi mano jugaba por el borde del pantalón, hasta que me apresure a palpar su sexo duro por encima del pantalón…

Mi mirada seguía fija en el mientras mi mano se paseaba desde la puntita, descendiendo hasta abajo poco a poco, presionando despacio con mi mano sobre ella…. Su mirada se tornaba más oscura si cabía pero en ella se veía que centelleaba el deseo…

Aparte un segundo la mirada de sus ojos para observar el luminoso que advertía de las plantas por las que pasábamos 32…. Aun queda, pensé…. Por lo que proseguí con nuestro juego…

Mi mano se deslizo de nuevo a la cintura de su pantalón, y con un hábil gesto desabroche su botón y baje despacio la cremallera, haciendo notar el paso de mis dedos bajando por su duro miembro…. Pero justo antes de terminar un arrebato se apodero de él y en segundos estaba de espaldas a él, con mi cara pegada a la pared del ascensor…

Poco después note sus manos subiendo por mis muslos, hasta mi trasero de nuevo, en el que propino una cachetada que hizo que mi cuerpo temblase por completo…  Entonces fue cuando note como subía mi vestido  y como su mano desde atrás tocaba mi húmedo sexo a través del fino tanga que llevaba, abrí las piernas un poco más para facilitarle la llegada y poco después note como apartaba aquella fina tela que separaba mi humedad de sus dedos…. Pero al hacerlo no se me ocurrió pensar que tal vez no eran sus dedos los que buscaban mi humedad…. Y así fue, su intratable boca se apresuro a esconderse entre mis piernas, buscando saborear mi sexo, y humedecerlo más si cabía la posibilidad…. Mis gemidos salían por segundos de mi boca, mis piernas intentaban tambalearse, pero sus manos en mi culo hacían que me sostuviera a él….

Mi cuerpo no paraba de reaccionar ante su lengua, y mis gemidos saliendo de mi garganta eran evidentes… El se percato que estaba completamente preparada para recibirle, o quizás eso era lo que yo pensaba…. De repente note como se incorporaba y como retiraba mi pelo del cuello y paseaba sus labios por él, mientras que dejaba salir su dura y gruesa erección de su pantalón y comenzaba a pasearla por la entrada se mi sexo…..

Y entonces de repente y de una sola tacada entro en mi interior, mi cuerpo tuvo esa mezcla de dolor y placer que hizo que me arquease perfectamente volcando mi cabeza en su hombro… Notar su calor contra el mío hacia que mi cuerpo se retorciese de placer y cuando pensaba que aquel placer era el tope comenzó a moverse dentro de mi…. Ese movimiento de vaivén que me estaba volviendo loca… 

Cogí una de sus manos y la lleve a mi pecho, lo incite a que lo aprisionase entre sus dedos a la vez que se clavaba en mi una y otra vez… Nuestras respiraciones cada vez se hacían mas y mas pesadas, el calor había aumentado superlativamente y el deseo por colmar nuestra sed era evidente…. El aumento el ritmo de una manera casi impredecible y comenzó a embestirme con sublime destreza… Una, otra y otra vez… Dentro, fuera… Mis gemidos se habían convertido en gritos de placer y su seductora voz se había convertido en rudos ronquidos de placer…

Estábamos a punto de llegar al clímax… Pero una de sus sacudidas hizo que esa corriente eléctrica atravesase mi cuerpo de arriba abajo, por completo, mi cuerpo quedo saqueado…. Pero el aun no había acabado, por lo que con mis manos le aparte de mi espalda y ahora era yo la que lo empujaba contra la pared.. Quería probar a que sabía, como era su jugo y como se derramaba completamente en mi boca… Por lo que sin pensarlo me arrodille frente a él y cogí su sexo entre mis mano, lo atrape entre las dos y comencé a moverlas en torno a él. Lo metía en mi boca, lo humedecía, lo sacaba, lo masajeaba, lo volvía a meter y mis dientes jugaban en la puntita de él, mordiendo despacio y notando como se desataba en el esa corriente….

Cogí sus manos y lo invite a que cogiera mi pelo y que desatase toda su locura contra mí, y así lo hizo, sujeto mi cabeza entre sus manos y comenzó a follar mi boca…  Notaba como entraba una y otra vez en mi boca, y como llegaba a mi garganta. Mi boca salivaba de una forma inigualable y por los rugidos de su garganta sabia que el clímax estaba cerca.

Saque su dura erección de mi boca y con ayuda de la saliva comencé a mover mi mano en torno a su sexo con avidez... Quería ese premio que me había merecido y como esperar menos, segundos después con mi boca abierta frente a él empecé a notar las primeras gotas que después de convirtieron en un gran chorro caliente tocando mi boca… Su sabor era exquisito como todo el…

Mientras me incorporaba pasando los dedos por la comisura de mi boca y colocándome el pelo y el vestido de la mejor forma posible, echaba un ojo al ascensor…. 67… Uf, justo a tiempo. Cogí mi bolso del suelo. Lo observe durante unos segundos como abrochaba su pantalón y colocaba su camisa mirándome con malicia.

Si que había sido distinto hoy el viaje en ascensor…..

¡Clin! Las puertas se abrieron, era mi planta…. Me acerque al desconocido, le di un apasionado beso ‘’Nos vemos por los ascensores’’ Susurre y salí del ascensor contoneando mi cuerpo y mirando de reojo como se quedaba plasmado viéndome salir de allí. 

Átame a tu piel (Parte 1)

Sentada en esa gélida e incómoda silla, noto como los dientes de esas rudas esposas se clavan despacio en mis muñecas situadas en mi espalda. Noto también como las cuerdas impiden que mis piernas se cierren, atadas a las patas de la silla, mientras mis ojos están tapados, mis sentidos se acentúan. Noto cada parte de mi piel, cómo reaccionan ante el metal de las esposas, la ruda espiral de las cuerdas y el tacto de la seda en mis ojos que no me permiten ver nada.

A mi espalda escucho como con un paso firme y decidido acentuado por unos finos tacones se acerca a mí. La boca se me seca instintivamente, mi respiración se acelera levemente y mi cabeza se mueve esperando encontrar algo que me diga el porqué de esa situación, el porqué de estar totalmente expuesta, ya que mi cuerpo se encuentra completamente desnudo sobre esa silla de madera.

De repente noto un soplo de aire fresco justo detrás de mi oído, un escalofrió recorre mi cuerpo como si fuese una corriente eléctrica, desde el punto en  el que siento el airee hasta la punta de mis dedos de los pies…. Trago saliva con dificultad, e inspiro aire sin poder evitar que  el aroma de su perfume llegue hasta el fondo de mis fosas nasales… ¿Qué tiene esta mujer que me provoca tanto?

Sigue con su juego, sopla despacio nuevamente por mi cuello, me estremezco, continua deslizándose por mi mentón, mi reacción instintiva es abrir la boca, esperando notar sus labios sobre los míos.. Pero no, continúa su camino bajando por mi garganta y paseándose por mis clavículas. Me estremezco en la silla, pero no me puedo mover… Estoy totalmente a su disposición. Continua bajando por mi pecho, paseándose por mi escote, en el momento en el que se va a uno de mis pechos y sopla un poquito más fuerte, trago saliva de nuevo y justo en ese momento noto como la punta de su lengua acaricia mi pezón totalmente erecto, sin poder evitarlo mi cabeza se echa hacia atrás y suelta un leve gemido….

Me percato de que sonríe, su sonrisa es música para mis oídos, pero continua con el juego, mi cuerpo pide a gritos su contacto, el roce de su piel en la mía, el tacto de su lengua por cada parte de mi cuerpo, pero es solo su suave aliento el que lo hace…. Continúa descendiendo por mi abdomen y cuando llega a la altura de mi ombligo contraigo el abdomen…. Se está acercando a mi centro de placer, y poco a poco noto como la temperatura de mi sexo se va incrementando, como mi respiración aumenta el ritmo paulatinamente y como poco a poco noto mi corazón latiendo en mi garganta…..

Aquel soplo de aliento no se detiene, pero cuando esperaba que se dirigiese directamente a mi sexo lo obvio…. Se paseo despacio por la cara interna de mis muslos y cuando estaba a escasos milímetros de él, se alejaba… No podía mas con esa tortura, necesitaba su contacto y ella lo sabía, fue justo en ese momento como note como un perfecto hilo de agua caía sobre mi sexo, mis muslos se contrajeron nuevamente y un ronco gemido salía de mi garganta, notar el contraste del agua fresca en mi sexo totalmente caliente hizo que un aluvión de sensaciones recorrieran todo mi cuerpo. Mi respiración y las reacciones de mi cuerpo le pedían a gritos notarla sobre mi cuerpo, fue entonces cuando paso levemente su dedo por mis labios, sin pensarlo comencé a lamerlo, chuparlo, devorarlo lascivamente, tenía una parte de su cuerpo en mi boca, y no lo iba a desaprovechar, necesitaba mostrarle el deseo que sentía por ella aunque sea en esa parte mínima de su cuerpo, ella soltó una leve risita cuando vio el ansia con el que devoraba su dedo, pasaba la lengua por toda la longitud de este, lo enroscaba con mi lengua, lo succionaba hasta notar los nudillos de su mano en mis labios, cuando tenía la boca completamente salivada lo dejaba fuera de esta y derramaba toda la saliva sobre él, dejando caer alguna gota sobre mi pecho mientras me estremecía…. Sabia porque quería humedecer ese dedo… aunque estaba segurísima que no necesitaría demasiada humedad en el, ya que al sitio al que iba destinado estaba completamente húmedo y sediento de contacto….

En tan solo un segundo su dedo comenzó a bajar por mi cuerpo, deslizándose por mi barbilla, bajando por mi garganta, recreándose entre mis pechos, bordeando el ombligo y finalmente llego a su destino…. Notaba la humedad del recorrido de su dedo y la misma vez que un aluvión de sensaciones de volcaron en mi cuerpo al sentir como repasaba perfectamente el dibujo de mi clítoris, jugando en torno a él. Mi cuerpo intentaba moverse buscando mas contacto, pero cada vez que lo intentaba ella se separaba en milésimas de segundo… Comprendí que debía estarme completamente quieta….

Su dedo jugaba alrededor de mi clítoris, era una perfecta tortura, notar su contacto en mi sexo, pero  no en mi centro de placer… Era tan frustrante, pero a la vez placentera aquella tortura, que a medida que pasaba el tiempo me iba dejando llevar más por su ritmo.

Notaba como dos de sus dedos dibujaban perfectamente el contorno de la entrada en mí… Como recogían esa humedad que había emanado de mi sexo u como poco después se colocaban sobre la entrada de este….  Sentí un calor inmenso saliendo de mi sexo… Justo en ese instante rozo levemente mi clítoris y sin dudarlo un segundo se adentro totalmente en mí con dos de sus dedos…. Un grito salió de mi, llego una bocanada de placer derramándose a borbotones, notaba lo húmeda que estaba a medida que sus dedos dentro de mi comenzaban a moverse despacio y comenzaban ese esperado vaivén dentro de mi recorriendo cada rincón de mi interior…

Comencé a notar como ese cálido fluido comenzaba a resbalar por mi sexo, saliendo de él, fue en ese momento justo en el que ella paro, si si, ¡Paro! ¿Cómo pudo cortarme ese tremendo placer que me estaba provocando?

En un segundo estaba justo detrás de mí y con voz sugerente susurro a mi oído…’’Muñequita, aun no es el momento de correrse, quiero que tu corrida esta noche sea inolvidable….’’ Mi cuerpo reacciono ante su voz, mi sexo sintió una oleada de calor, que pedía a gritos ser mimado y consentido, pero no…. Ella no le iba a dar el gusto a mi sexo.

Mi cuerpo se encontraba loco por notar más de ella y fue entonces cuando note sus dientes mordiendo mi cuello…. Mi cuerpo se retorció de placer en la silla…. Mi cuello… Uno de los puntos más sensibles de mi cuerpo… Poco después sentí como algo helado recorría mi cuerpo a medida que se iba convirtiendo en líquido, poco después caí en la cuenta de que era helado…. Uhm si… Helado. Helado de frutas de la pasión… A medida que se iba derritiendo e iba cayendo por mi hombro, ella abalanzaba su boca a mi piel, impregnando su boca con el sabor de las frutas y dejando un olor dulce en mi piel, repitió la misma operación en el otro lado del cuello, y mi cuerpo no se quedaba impune de esas sensaciones, a cada momento necesitaba más, mi sexo ardía, mis pezones estaban duros como piedras, mi garganta se resentía por cada gemido que salía de ella y mi boca se encontraba totalmente seca…..

Después de dejar limpio mi cuello de helado, sin esperarlo se abalanzo sobre mis labios… ¡Por fin! Por fin podía probar su sabor… Esa mezcla de dulzura de la fruta de la pasión, el contacto de sus labios carnosos, su lengua juguetona invadiendo por completo mi boca, mientras atrapaba con avivez la mía… Tenía ese toque posesivo pero a la vez dulce, me volvía completamente loca su manera de besarme. Mi cuerpo reaccionaba una vez más, y fue en ese momento cuando sentí que por mi sexo resbalaba ese elixir que salía de mí… Ese que precisamente ella había provocado. No tardo en darse cuenta, y notando como se relamía abalanzaba su boca sobre mi sexo…. Mi espalda se arqueo todo lo que puso cuando su boca tomo contacto conmigo. Notaba como  los tobillos y las muñecas me ardían, pero mi cuerpo no podía resistirse más a su contacto, mi espalda se arqueaba, hasta el punto de que mi culo perdía contacto con la silla, esa silla de madera que estaba húmeda….

Su boca degustaba como si de una delicatesen se tratase cada rincón de mi sexo, jugueteaba con mi clítoris entre sus dientes, lo atrapaba, succionaba, lamia, chupaba, mordía…. Esa cantidad de sensaciones provocaban que me quisiera derramar perfectamente sobre su boca… Su lengua se paseo por todo mi sexo, recogiendo cada gota de fluido que salía de él, se arrincono en la entrada de mi sexo, jugaba en ella a medida que este se iba dilatando cada vez más… En cuestión de segundos su lengua estaba dentro de mi sexo, me sorprendía como  podía poner tan dura esa lengua para que mi cuerpo sufriese una nueva reacción,  esa reacción que hizo que mis piernas comenzaran a temblar…. Mi espalda se arqueara más si cabe y notando como esa corriente de placer recorría mí cuerpo de arriba abajo se transformaba en un afluente….

Afluente que comenzó a salir de mi sexo, notaba como me derramaba perfectamente sobre su cara, como a medida que su lengua se movía dentro de mí ese afluente se convertía en algo más continuo y proyectado… Mi cuerpo se quedaba exhausto, cuando pensé que ya había terminado… Pero no. Se separo de mí y se abalanzo en mis labios de nuevo, notaba mi sabor en su boca, la humedad de su cara, y el embriagador olor a sexo que recorría su cara….

A medida que seguía besándome fueron dos de sus dedos los que se adentraron en mi sexo de nuevo, cuando ya pensaba que había tenido uno de mis mejores orgasmos, cuando note que se movían con frenesí dentro de mí, quería mas, ansiaba sacar más de mi… Y fue entonces cuando quito la venda de mis ojos. Mi mirada tomo contacto con la suya, su cara de deseo era totalmente seductora, los gemidos no paraban de salir de mi, y en mi sexo sus dedos entraban cada medios segundo dentro, fuera, dentro, fuera, empecé a escuchar como el sonido se terciaba mas chapoteante y como su mirada me pedía que mirase en dirección a mi sexo….  Y entonces cuando mis muslos empezaron a tambalearse y mi sexo a convulsionar sus dedos salieron de mí un perfecto chorro salió de mi sexo empapando todo lo que encontraba a su paso….

Mi cuerpo después de esa espectacular sacudida quedo completamente rendido… Fue entonces cuando el palpitar de mi sexo era indescriptible… Ahora me daba cuenta de los restos de placer mezclados con dolor en mi cuerpo… Mi garganta se irrito por completo con algunos gemidos roncos salidos de ella, mis muñecas habían tomado un color rojo intenso por las fuertes sacudidas de mi cuerpo, y mis tobillos tenían la perfecta marca de la trenza del cordaje dibujados en ellos….

Instantes después me soltó de la silla, y cuando intente ponerme de pie sentí mis piernas flaquear…. Aquel orgasmo me había dejado sin fuerzas, estaba completamente exhausta….

Escuche que ella salía de la habitación cuando estaba suelta, y vi que entraba en el baño… Escuche como se abría el grifo de la bañera y como el chorro empezaba a llenarse… Segundos después vi como ella salía del baño contoneándose perfectamente desnuda acercándose a mí, me tendió la mano y me susurro…. ‘’Acompáñame a tomar este baño, quiero relajar tu cuerpo un poquito para seguir deleitándome con el…’’

                                                                              Continuará

Fotografiandote...

Sentía como mis dedos se adentraban hasta el fondo de su ser, como su sexo caliente palpitaba sobre mis dedos, sus jadeos entrecortados se iban convirtiendo en gemidos que desgarraban su garganta y sus piernas se dejaban ir en busca de ese ansiado orgasmo…..

11.00 En punto de la mañana, un día mas de trabajo me esperaba, una chica conocida contacto conmigo para que le hiciese una sesión de fotos, me moría de ganas de hacérsela porque cada vez que escuchaba su voz susurrando música, mi piel reaccionaba ante ella, me encantaba como acariciaba la guitarra al compás del sentimiento de su voz. No me podía creer que ella justamente diera conmigo para que inmortalizase algunos momentos…

Puntual acudió a la cita, a las 11.15 estaba sonando el timbre de mi puerta, al abrirla me encontré en el umbral a esa preciosa chica, de pelo castaño, rizado y largo que traspasaba su cintura y caía perfectamente sobre su pecho que se dejaba ver por una fina blusa azul de tirantes, que solo podía ir acompañada por unos jeans negros ajustados y unos finos tacones de Louis Vuitton a juego con la blusa. Me quede durante unos segundos admirando la belleza por naturaleza que tenia aquella chica.

 Acto seguido articulando palabra como podía la invite a pasar. Dos cálidos besos de presentación me bastaron para que su aroma impregnara mis sentidos y llegara al fondo de mi olfato… Si…. Issey Miyake, no podría ser otro perfume.

Ella expuso sus ideas de por donde quería que fuesen los tiros de la sesión, me apresure a preparar la luz tenue, las velas por el suelo, que dio la tremenda casualidad de que me quedaban algunas de esos baños relajantes que tanto me gustan y me apresure a cerrar las persianas. 

Quería algo tenue pero que dejara ver la silueta de su cuerpo, a la misma vez que las expresiones bajo la tenue luz. Prepare la cámara y ella tomo asiento.

Minutos después, a medida que mi cámara no paraba de captar tal belleza me daba cuenta de que el objetivo la adoraba, captaba cada expresión, cada movimiento, cada sentimiento…. 

Era increíble de la forma en la que mi dedo no paraba de apretar una y otra vez el disparador….

Sentada, de pie, tumbada, de espaldas, de lado, desde arriba, desde abajo…. Fotos y mas fotos… Y un rayo de luz ilumino mi creatividad, me acerque a colocarle el pelo sobre los pechos y me atreví a sugerirle quitar la blusa y que en su lugar se cubriera con su pelo y sujetase la guitarra delante. 

Ni por un segundo imagine que entrara en mi juego y antes de que me diera cuenta su blusa estaba en el suelo de mi piso y ella se colocaba de lado y entre la sombra de las velas y la guitarra logre ver la perfecta curva de su pecho e instintivamente no pude evitar morderme el labio. 

Comencé de nuevo a dispar, en un momento me percate que la expresión de su cara era distinta, en su mirada se escondía algo de sexualidad, si si, sexualidad, que en ese animo a que se quitase la camiseta se pronuncio. Sus ojos se oscurecieron, su sonrisa era un tanto provocativa y con la mirada…. 

Con la mirada atravesaba al objetivo de mi cámara y se colaba por mi retina, recorriendo todo mi cuerpo hasta llegar al centro de mis piernas. En un momento dado ella se percató de que algo sucedía y se puso de pie mirándome y pregunto con esa cara provocativa…. ‘’ ¿Va todo bien?’’ En lo que a esa pregunta añadió el gesto de echarse el pelo hacia atrás, lo que dejo sus pequeños pero voluptuosos pechos a mi vista.

En apenas un segundo mi boca se secó, mi pulso se acelero y entre mis piernas algo empezaba a palpitar… 

Y como no con su habitual desparpajo se acerco a mí con su suave contoneo, marcando cada paso moviendo las caderas a un lado y al otro, me quita la cámara de las manos y saca la tarjeta, poniendo otra en blanco en su lugar, me devuelve la cámara y se acerca a mi oído susurrándome ‘’ La sesión para el público ya la tienes, ahora me gustaría hacerte un pequeño regalo y hacer algo mas…. ¿atrevido?’’ No daba crédito a lo que estaba pasando, una chica que idolatraba, que ni en mis mejores sueños se me pasaba por la cabeza tenerla tan cerca y ahora no solo eso…

 La tengo en el salón de casa, semidesnuda y pidiéndome algo mas ¿Atrevido? Mi cuerpo reacciona ante la propuesta pero mi nerviosismo me bloquea por un instante en el que aparto la cámara de mis manos dejándola a un lado y me abalanzo sobre ella, llevando al contacto mis labios con los suyos, dejando que nuestras lenguas jugueteasen a su antojo, palpando el suave roce de su piel mientras con mi mano en su nuca pronunciaba aun más el beso.

Cuando casi ya no pudo respirar más me separo y ahora es mi expresión la que ha cambiado, he pasado del ámbito profesional al sexual, en solo medio segundo, lo que mi cuerpo  tardo en activarse ante su jugosa propuesta, pero no estaba dispuesta a seguir el juego sin antes probar al juguete….

Ella me miraba con una sonrisa divertida cuando me separe de sus labios y después de contemplarme durante unos segundos se apresuro a tomar contacto de nuevo con mi cuerpo. Pronto mi camiseta negra que dejaba un hombro descubierto yacía sobre el sofá y el botón junto con la cremallera de mis short estaba desabrochado mientras mi mirada no se apartaba de la suya.

Yo no tarde demasiado en abalanzarme de nuevo sobre sus labios a la vez que mis manos ansiaban su desnudez completa, se descalzo, le baje los jeans pasando mis uñas arañando levemente su piel a medida que mis manos bajaban por sus piernas y clavando mi mirada en ella cogí el borde de ese tanguita azul precioso que llevaba y lo bajaba con la ayuda de mis dientes…

No podía perder la oportunidad de observar de lejos esa maravilla de cuerpo desnudo, me senté en el borde de la mesa tomándome unos minutos para recrearme en la vista, cogí mi cámara y empecé a fotografiarla de nuevo, su boca, su mirada penetrante, su pelo colgando sobre esa maravillosa espalda desnuda, su trasero perfectamente moldeado por el deporte, sus delicados pies que estaban en puntillas para evitar el contacto frio del mármol en sus pies y como no me atreví a fotografiar sus pechos a medida que ella movía las manos por su cuerpo y se dejaba ir a ese centro de placer…. Disfrutaba con cada toma, cada instantánea que encerraba tanto y que solo yo iba a tener guardado para mí.

Solté la cámara de nuevo y me apresure en busca de su cuerpo, cogí sus manos y las sujete para que parase de tocar su cuerpo, porque ahora me iba a encargar yo de ello.

Comencé a besar su cuello a medida que mis manos se deslizaban por su cuerpo, me detuve en sus pechos y comencé a masajearlos despacio, disfrutando del tacto de su piel, recreándome en sus pezones y retorciéndolos levemente entre mis dedos y notando como el primer jadeo salía de su garganta sobre mis labios.

 Mi boca no podía quedar exenta de probar su sabor… Por lo que comencé a bajar en un camino de besos y mordisquitos desde su cuello, pasando por su clavícula, entreteniéndome un poco sobre su pecho, descendiendo por su terso, abdomen, hasta llegar a su sexo…. Mis lengua empezó jugueteando con el, notando su calor, ese sabor agrio mezclado con dulzura, un sabor único, en el que mi boca comenzaba a dejarse llevar por la reacciones de su cuerpo….  

Ella se dejaba llevar, se entregaba a los placeres que le provocaba mi lengua que recorría una y otra vez su sexo humeante. 

Lamia con descaro cada rincón de su sexo, jugueteaba con su clítoris entre mis dientes, mientras no paraba de observar la expresión de su cara, como se contraía en gestos de placer y entonces me separe un instante de su sexo, cogiendo de nuevo mi cámara y mientras volvía a tomar contacto con esa parte tan caliente de su cuerpo fotografiaba de nuevo esa expresión, esa cara de placer que ponía cada vez que mi lengua se entretenía en su clítoris o cuando la penetraba frenéticamente.

Me estaba gustando sobremanera aquel juego que se había empezado a crear, esta vez era mi mano la que tomaba el lugar que antes ocupaba mi boca…. Mis dedos comenzaron a jugar en su interior, sentía como mis dedos se adentraban hasta el fondo de su ser, como su sexo caliente palpitaba sobre mis dedos, sus jadeos entrecortados se iban convirtiendo en gemidos que desgarraban su garganta y sus piernas se dejaban ir en busca de ese ansiado orgasmo….. 

Y en ese justo momento capte su perfecta expresión de placer, ese instante en el que las piernas le empezaban  a temblar, su sexo emanaba ese jugo tan delicioso, y ese calor se intensificaba paulatinamente hasta alcanzar su máximo esplendor.

Solté mi cámara de nuevo y saliendo de su interior me puse a su altura y lamiendo aun el jugo de su sexo en mis dedos mi mirada era puro deseo…. No sabía cómo había llegado hasta aquí… Solo sabía que quería mas, quería mas de esa mujer….

Biiiiiiiip! Biiiiiiiiiip! Biiiiiiiiiiip! ¡PUTO DESPERTADOR! ¿Por qué siempre los mejores sueños y mas placenteros son solo eso, sueños? Cada momento puede ser bueno para soñar y dejar volar la imaginación…. Y tu…. ¿Dejaste ya volar la tuya hoy? 

Abracemos la noche, quiero escribir los más lascivos versos en tus labios, déjame la pluma de tu lengua y que mi tinta escriba esta sensación que me arrebata el alma en la comisura de mi boca.

Perderme en tus labios es lo que deseo, que la tinta de tu boca se transforme en besos, porque ni tú ni yo somos capaces de controlar estas sensaciones que fluyen por nuestros versos…

Tan solo déjate llevar por la humedad de mis heridas, cúbrelas con tus brasas, que queme la piel al roce de tu boca… Quiero un grito que salga de tu piel, quiero llenarme de ti…

Descubre mis secretos más íntimos, quiero siempre estar así arada por los deseos impuros que naden de esta piel que me abriga cuando te noto en mi espalda, abrazándome y haciéndome sentir de nuevo viva…

¿Ahora ya se donde quiero estar?

En plena fusión contigo hasta que el alba despida la noche… Hasta que la piel y la mente se contradigan… Hasta que nuestros cuerpos no puedan mas y nuestros deseos estén saciados hasta el máximo nivel…

Quiero sentirte

Ahí estas de nuevo con tu risa traviesa y las fibras rudas y fuertes de esas cuerdas que llevas en las manos... Si quieres tenerme atada, a tu merced, entre tus manos para hacer de mi lo que quieras, a tu antojo... 

 

Tus ojos brillan encerrados en un ego de frenesí y deseo, y es así cuando con paso firme y decidido decides llevar mis manos a la espalda y comenzar a dar vueltas con las finas cuerdas. 

Mi boca se seca a la vez que mi piel se eriza al sentir el suave roce de la yema de tus dedos por mi piel, pero el tacto de las fibras hacen que dentro de mi empiece a avivarse esa llama de deseo que se muere de ganar por quedar a tu mera disposición...

 

Tendida en la cama mi pecho queda prisionero bajo el colchón notando las sabanas rojo satén mientras mi cuerpo esta maniatado y mis piernas completamente abiertas, esperando tus labios, el tacto de tu lengua, el suave soplo de aliento cálido entre ellas...

Minutos después tus manos comienzan a pasearse por mi cuerpo, tocando, acariciando, arañando y dejando aparecer alguna que otra cachetada que empieza a dejar el tono rojizo en mi trasero que a medida que pasa el tiempo se eleva para buscar el contacto te tus manos cálidas...

Y ahí estas, noto el roce de tus dedos en mi sexo, paseándose por mi humedad, esas humedad que tu has provocado, y poco a poco te adentras en mi, deslizando tus finos dedos en mi interior y comienzas con tu habitual gesto de llamado... Si... Deseas conseguir esa fuente de mi, quieres que mis piernas tiemblen, que mis músculos es tensen, y que de mi interior salga ese fluido cristalino que te encanta.... 

Y solo tardas 5 minutos en provocarme, en hacer que todo mi cuerpo se tambalee, que me deje caer en el abismo de tus manos sintiendo la tormenta de sensaciones, ese vil orgasmo que provocas con solo el tacto de tus manos...

Quiero sentir tu aliento, quiero sentir tus labios, quiero sentir tus besos, quiero sentir tu cuerpo..... Quiero....

Devorame otra vez (Parte 2)

Esos arrebatos que me entran al tenerte cerca no puedo controlarlos…. Mis manos no paran de deslizarse por tu cuerpo, mis labios no se separan de tu garganta sintiendo el suave ronroneo que emites. Me encanta acariciar cada milímetro de tu piel con mis labios, ese fino tacto, esa leve aroma a vainilla, el sentir como tu vello se va erizando al paso de mis labios…

Y en décimas de segundo estas contra la pared, sintiendo como el contraste del frió del cemento y el calor de tu cuerpo hacen que un escalofrió recorra cada poro de tu piel erizando instintivamente cada parte de tu cuerpo y haciendo que tus pezones queden  duros como piedras.

Mi mirada busca la tuya, intentando buscar ese fuego que produces dentro de mi con solo mirarme y ahí está esa mirada de deseo, ese toque felino, mezclado con dulzura y perversión… Mi boca no duda un segundo abalanzándose sobre tu pecho, cogiendo entre mis dientes ese perfecto pezón, retorciéndolo levemente y dando un fino y delicado chapetón mientras mi mano se desliza por mi abdomen introduciéndose en mi pantalón.. Buscando saciar mi cuerpo del placer que me provoca tenerte aquí y de esta manera…

Mi mano comienza a acariciar ese centro de placer, mientras mi boca desciende por tu cuerpo, dejando un camino de mosquitos por tu abdomen, llegando a ese trocito de tela azulado de encaje y mi ansia de probarte no duda un segundo en lamer tu sexo por encima de la tela… 

Me encanta notar el calor y ver como poco a poco te agitas, como instintivamente mueves la pelvis para notar mi boca más cerca de ti… Aparto despacio la fina tela dejando salir esa preciosa joya y sin dudarlo ni un segundo me pierdo entre tus piernas… Ansió probar ese elixir que me tienes que brindar… Si… Dámelo mientras mi mano busca el mío entre ese vil deseo de complacerte….

Devorame otra vez (Parte 1)

Siento como la brisa inunda tu pelo, envolviéndolo entre sus finos dedos, haciendo que el suave soplo de ese aroma recorra todos los poros de mi piel.

Se que te acercas sigilosamente por mi espalda… Si… Noto tu presencia, como ese suave aroma se acerca activando mis sentidos….

Son tus manos las que rozan con la suave yema de los dedos mi nuca y empiezo a sentir como mi vello se eriza al paso del tacto de tu suave piel y como mi corazón late fuertemente en mi garganta….

Ahora son tus labios los que se acercan demasiado, buscando un refugio en mi cuello.. ¿O tal vez sea un simple aperitivo?... Si… Creo que es eso…

Comienzo a notar el frescor de tu lengua, recorriéndolo despacio, empezando a sentir el dulce tacto de tu lengua aprovechándose de mi inocencia en mi cálida piel.

Ya no puedo mas, mi instinto se despierta por completo y son mis manos las que lascivamente se pasean por tu cuerpo, haciéndome notar también tus deseos, esos mismos deseos que tengo yo y que no paran de resonar en mi cabeza.

Mis labios buscan con ansia y avidez los tuyos, mi lengua busca juguetear con la tuya para así probar su tacto antes notado sobres mi cuello.

Mis manos se apresuran a despojar tu suave camisa ajustada y ese corto pantaloncito oscuro, dejando visible cada curva de tu cuerpo casi por completo.

Mi boca se humedece rápidamente y entre mis piernas comenzando a notar ese suave palpitar, despertando cada vez mas y mas la bestia que hay en mi….

Entonces vuelvo a ver tu silueta en la oscuridad, posada en la ventana de mi habitación, como cada noche, acudiendo a la cita, para contemplar como una y otra vez mi sed y mi deseo de que traspases esa ventana se vuelve encimero.

Mi cuerpo posa desnudo entre las sabanas, siendo visibles mis pezones erectos bajo la fina tela rosada que me envuelve. Mis manos se deslizan recorriendo mi cuerpo una y otra vez, mientras mi vista no aparta la mirada de la ventana…. Me encanta que me observes, me encanta sentir esa mirada lasciva sobre mi cuerpo, me encanta que me recorras con la mirada una y otra vez, notando como algo crece en tu interior, así como bajo tu pantalón….

Mis manos se abalanzan fieles en busca de mi sexo, sintiendo su humedad, buscando la calidez, y esperando encontrar como cada noche ese fruto de la lujuria que se derrama cada noche en mis sabanas al sentir tus ojos clavados en mí.

Mi cuerpo comienza a vibrar, a sentir la subida de la temperatura, a notar la excitación mas y mas y en ese momento es cuando te quiero debajo de mi, te quiero sentir dentro totalmente, quiero notar como palpitas dentro de mí y como nos acompasamos el uno con el otro….

Miro directamente a tus ojos mientras noto el quemazón en mi garganta, cuando siento que estoy a punto de alcanzar el climax… Y solo atino a susurrar una palabra entre gemidos…. ‘’Follame’’…

Tu, mi fruta prohibida

Déjame probar la fruta prohibida de tu cuerpo.

Déjame acariciar lentamente la piel de tan suculento manjar.

Déjame disfrutar del placer que me produce hincar mis dientes en esa fina piel.

Déjame adentrarme hasta tu corazón para así poder deleitar a mi suave paladar con el jugo que gotea poco a poco  por mis labios y manos…

Porque no hay mejor forma para disfrutar de las frutas prohibidas que el tacto de las manos, el fino soplo de aliento rozando levemente la piel y disfrutando de la exquisitez de tan sutil manjar…. 

Déjame…. Déjame esta noche poder degustarte, poquito a poco, lentamente, despacio, disfrutando y saboreándote…

Tu… Mi fruta prohibida, mi dulce pasión, mi alimento nocturno, mi dulce bendición.