viernes, 22 de noviembre de 2013

Solo 5 minutos....

Tú y tu bendita manía de considerarme tu presa, sin saber que la presa eres tu…. De nuevo después de tanto tiempo miro a mi alrededor y se me hace raro ver tu larga melena castaña alborotada, loca por seguir el ritmo de la música, por sentirla solo como tu sabias hacerlo, y de nuevo nuestras miradas se cruzan, igual que como hacia un par de años la tensión de la adrenalina en nuestras miradas se apoderaba de nosotras, un leve brillo de perversión hacia mella en nuestra mirada, solo un leve asentir por mi parte basto para que con paso firme y decidido te volvieses a acercar a mi….


Sentadas en la barra mi mano buscaba tu pelo, acariciaba tu muslo despacio, rozando el leve tacto de tu piel que se dejaba intuir bajo las medias de tus largas piernas….Aun recuerdo tu pelo entre mis dedos, como me dejabas adueñarme de ti, aferrándome a esa larga mata de pelo, como me dejabas sentir como tus gritos salían de tu garganta sobre mis labios… Si… Esa sensación, quiero volver a sentirla… Me acerque a tu oído y despacio te susurre ‘’ tienes 5 minutos para entrar en el baño, más vale que estés allí cuando vaya..’’ y ahí estaba, tu mirada lasciva penetraba en mis ojos, no podías resistir morder tu labio inferior mientras te ponías de pie, dabas un último sorbo a tu copa y salías dispuesta rumbo a ese pequeño rincón…. 
En un momento mi noche había cambiado, esa noche que empezaba con un sabor amargo parecía hacer que tuviese un sentido distinto. Termine la copa de un trago y con una de mis mejores sonrisas  salude al camarero y fui rumbo a tu encuentro….
5 minutos, solo 5 minutos me bastaron para estar besando nuevamente tus labios, enredando mis manos en tu pelo y volviendo a sentir ese sabor, esa lujuria, ese frenesí…. Estabas deseando que te hiciese mía, pero no eras capaz de decirlo, de un solo gesto te gire rápidamente haciéndote quedar contra la pared, si…. Eso es lo que querías…. Me apresure rápidamente en coger tu pelo, y comenzar a trenzarlo despacio, recreándome en ese momento mientras de tus labios no paraba de salir `` no, no, trenza no, trenza no…`` Si…. Trenza si´´, sabias que era lo que te esperaba después de tener tu pelo así…
No podía aguantar más, tenia tus manos prisioneras en tu espalda bajo una de las mías, mientras con mis piernas separaba despacio las tuyas, y si, me apresure a bajar tus medias, junto con tu tanguita, uhmmm si…. Tan empapado como me lo esperaba.  Guarde tus medias en mi bolso y mi mano comenzó a acariciarte despacio, recreándose en cada parte de tu sexo, sintiendo la humedad, ese calor que emanaba de él, como por momentos tus piernas se tambaleaban… Sin dudarlo un segundo  cogí ese precioso tanguita negro de encaje que llevabas y me recree en ese momento, comencé a introducirlo despacio en tu interior a la misma vez que cogía tu trenza y tiraba suavemente de ella… Si… Ya empezabas… Tus gemidos eran evidentes así como tu humedad hacia que ese pequeño tanguita se perdiese en tu interior.
Sin titubear me apresure a acercar mis labios a tu sexo y comencé entonces un leve jugueteo con tu clítoris en mis labios a la vez que notaba como apretabas, queriendo hacerte sentir dentro esa pequeña prenda intima. Cuando note que tu respiración perdía el control lleve mis dientes al encuentro de esa prenda desaparecida y levemente comencé a tirar, dejando que poco a poco fuese saliendo de dentro de ti, sintiendo la humedad recogida en él, sintiendo como tus gemidos emanaban despacio de tu garganta, como intentabas controlarte, pero como no podías evitarlo…. Y lo atrape del todo en mi boca, sentía de nuevo ese sabor agrio mezclado con la dulzura de tu piel, sintiendo de nuevo que tu cuerpo me pertenecía.
Guardando el tanguita también en mi bolso, comencé a recorrer tu cuerpo con mis manos, tus hombros, tu espalda que esa preciosa blusa dejaba al desnudo casi por completo, tus glúteos, tus muslos y si…. Me perdí entre tus piernas de nuevo… Comencé a adentrarme dentro de ti, buscando ese elixir que tanto echaba de menos poder sacar de ti, y mis dedos comenzado su búsqueda, despacio, haciendo que tu cuerpo comenzase a vibrar poco a poco, aumentando el ritmo paulatinamente, y rozando tu clítoris mientras mi mano tiraba de tu lacio pelo perfectamente recogido…. Comenzaste a gemir más fuerte, y a medida que lo hacías la tensión de mi mano en tu pelo iba en aumento, como la velocidad de mis dedos en tu interior…. `` Si venga, dámelo, lo estas deseando`` Susurraba en tu oído terminando con un mordisco en tu lóbulo derecho…
Y ahí estaba, comenzaba a sentir las pequeñas gotas en mi mano, cuando estas gotas comenzaron a ser un leve afluente que salía de ti, resbalaba por tus muslos, perdiéndose en el suelo, haciendo que te derramases perfectamente…  Con un leve tirón de tu pelo volviste a mirarme de nuevo y tus labios buscaron los míos, haciéndolos presos de los tuyos, dándome ese leve agradecimiento por hacerte mía una noche más. ``Ahora, esto me lo llevo a casa, vamos a terminar la noche ahí a fuera, pero sin esto.’’ Dije mientras sostenía tus medias y tu tanguita en mis manos, sonreíste, negaste con la cabeza y te soltaste la trenza mientras salíamos del baño mirando a nuestro alrededor….

Noches frías  que se vuelven momentos de lujuria y desenfreno, en la que terminas en el baño de un tórrido antro sintiendo el poder bajo tus manos, ese poder de dar placer, sin necesidad de recibir nada a cambio, solo una de las mejores sonrisa, y el más bello orgasmo….

domingo, 17 de noviembre de 2013

El azar......



Dejemos que no sea el azar el que nos elija…. Elijamos nosotros nuestra propia presa… 
Si… Tu… No me mires así, ven acércate, quiero sentirte. Comenzando por el juego más antiguo del mundo…. La seducción, quiero bailar frente a ti, notar como a poco se clavan tus ojos en mí, como ya no es el azar el que elije, sino que soy yo la que te elije, para que pongas tú vista en mí….
Comienzo a contonearme suave y paulatinamente, cuando veo que te vas acercando, si, lo veo, y no solo eso, lo noto, como tu mirada picara se centra en mi, en las curvas de mi cuerpo, en mis manos, mis brazos, mi cabeza, mi cuello y poco a poco vas notando como cada parte de mi se mueve mas y mas, mis caderas, mis piernas, mis pies… Al ritmo que marca la música y al ritmo que me marcas tu…. Y ahí estas, detrás de mí, ahora tu eres mi presa, y yo soy tu dulce manjar, dejémonos llevar por un juego más que infernal, donde la lujuria, el desenfreno, el éxtasis, la excitación, el morbo y unas cuantas cosas más son las herramientas de juego, donde tu cuerpo y el mío son la partida, y tu y yo ponemos todos los medios para ganar…. Así que vamos, coge mi mano y comencemos a bailar en esta danza del mal…

Ahora no es mi cuerpo el que se mueve para ti, son los dos, que se juntan para moverse al ritmo de la música, tú me llevas, y yo te sigo, mi mano coge la tuya mientras la otra se sitúa en tu cintura, y comenzamos a bailar, a movernos juntos, noto tu respiración frente a la mía, tu cuerpo pegado al mío, como poco a poco el calor se va apoderando de nosotros, como me devoras con la mirada y como me haces estremecer con tu forma de moverte…